miércoles, 30 de noviembre de 2011

Exprimirse

Últimamente estoy que no paro. Me muero de ganas de hacer muchísimas cosas. Quiero escribir, quiero sacar fotos, quiero pintar, quiero actualizar el blog, quiero tatuarme, quiero viajar...
Quiero hacer de todo y no tengo inspiración para nada. Estoy en casa y tengo un tembleque nervioso en las piernas por escribir o algo, pero no tengo ideas.
Empiezo mil entradas para el blog que nunca termino.
Estoy en la calle y sobo y resobo la cámara, pero no saco fotos.
Estoy inquieta y me empiezo a frustrar.
No hago más que atiborrarme a mandarinas y atiborrarme a ver blogs y flickrs ajenos buscando un impulso que me haga saltar y decir: "Venga ¡Vamos a ello! ¡Eres un tigre, eres un tigre, eres un tigre!".
Por una vez en mi vida tengo todo el tiempo del mundo para dedicarme a lo que me gusta y se me está escapando en chorradas.
¡En mandarinas se me escapa! Menuda adicción, oiga...
Estoy tan acelerada que me muero de ganas de viajar 6 horas en tren con M. aunque no tenga ni un duro.
Y le insisto y le reinsisto: "¡Voy contigo! ¡Me da igual el dinero!"

Espero que esta época tan poco productiva pase pronto.
Por el momento le voy a dar a Publicar Entrada antes de releer todo esto y arrepentirme. ¡Hombre ya!

lunes, 28 de noviembre de 2011

Schokolade

Es cierto, siempre tengo hambre. Todo el día. Y además no tengo control.
Las cosas ricas son uno de mis estados de la felicidad (algún día diré cual es el otro).
Por ejemplo, hoy me encontraba aquí:
Sí, no era la primera vez que estaba allí.
 Cuando me dice M. "Voy al super con tal, quieres algo?". Y yo le dije que no, que muchísimas gracias por su oferta, pero que estaba bien y no necesitaba nada (probablemente no fueron mis palabras exactas, no soy tan maja).
Total, que aún así fue tan guay como siempre y me trajo una de mis mayores perdiciones, también llamada

CHOCOLATE DEL FAMILIA CON ALMENDRAS/AVELLANAS.

En serio, es una locura. Puedo estar sentada, leyendo o dibujando o escribiendo o haciendo lo que sea, y sin darme cuenta comerme una tableta entera.


Así que ahora tengo una tableta de chocolate para mi sola y me la pienso comer entera mientras veo alguna peli (la peli es lo de menos).
Y después de cenar, claro.

Rico, rico.

sábado, 26 de noviembre de 2011

California Dreamin

Me acuerdo que cuando era bastante pequeña y no tenía música propia, me había hecho con un radiocassette viejo que había sido de mi hermana y me dedicaba a grabar en cintas las canciones que me gustaban, que sonaban por la radio. Normalmente no me daba tiempo a reaccionar y ninguna de las canciones grabadas tenía principio. Y además se oía invariablemente la voz del locutor por el medio o al final. Pero me encantaban esas cintas.
Esas, y una original de mis padres (que ahora tengo yo) de The Mamas & The Papas. Claro que no sabía ni qué grupo era ese ni nada, pero me había escuchado esa cinta de cabo a rabo varias veces y mi canción favorita era esta, la primera de la cara B.


Me sentaba en una esquina del salón, al lado de un radiador, y la escuchaba. Me encantaba. Fue mi canción favorita varios años (hasta que llegaron la Spice Girls o alguna historia de estas y acapararon mi atención, supongo).

Es curioso, me he mudado dos veces y vuelvo al punto de origen. Y ese salón, es mi habitación. Y la cadena de música que antes era de mi padre, ahora es mía, y está en el mismo sitio.

Y sigo teniendo esa cinta.